Acusación contra Trump: Stormy Daniels teme por su seguridad

El juez Juan Merchan en su oficina en el Tribunal Penal del Condado de Nueva York el 21 de octubre de 2022. Ahmed Gaber/The New York Times/Redux

Cuando Donald Trump ingrese a un tribunal de Nueva York el martes, se enfrentará a un juez experimentado que no es ajeno al expresidente.

El juez interino de la Corte Suprema de Nueva York, Juan Merchan, condenó a prisión al confidente cercano de Trump, Allen Weisselberg, presidió el juicio por fraude fiscal de la Organización Trump y supervisó el caso de fraude criminal de su exasesor Steve Bannon.

Pero la lectura de cargos histórica de Trump puede verse como el caso de mayor perfil de Merchan hasta la fecha, incluso después de una larga carrera en la cima de los tribunales de primera instancia a nivel estatal.

Merchan ha sido descrito por los observadores como un juez "duro", pero justo, sin importar quién esté delante de él.

Aquí hay más antecedentes sobre el juez cuya sala del tribunal pronto será el centro de atención:

Nacido en Bogotá, Colombia, Merchan emigró a Estados Unidos a la edad de seis años y creció en el barrio neoyorquino de Jackson Heights, Queens, según un perfil del juez del New York Times. Fue el primero de su familia en ir a la universidad.

Merchan inicialmente estudió negocios en Baruch College en Nueva York. Abandonó la escuela para ir a trabajar, solo para regresar varios años después para terminar la escuela y poder obtener su título de abogado, informó el Times.

Con el tiempo recibió su título de abogado de la Universidad de Hofstra.

Los abogados que comparecieron ante él le dijeron a CNN que Merchan no admite interrupciones ni demoras, y se sabe que mantiene el control de su sala del tribunal incluso cuando sus casos llaman mucho la atención.

El abogado de Trump, Timothy Parlatore, dijo durante una entrevista el viernes en CNN que Merchan “no fue fácil” con él cuando procesó un caso ante él, pero dijo que el juez probablemente será justo.

“He juzgado un caso frente a él antes. Él podría ser duro. No creo que necesariamente vaya a ser algo que vaya a cambiar su capacidad para evaluar los hechos y la ley en este caso”, dijo Parlatore.

Varios miembros de la policía de Nueva York ingresan a la Trump Tower el viernes 31 de marzo en Nueva York. (Bryan Woolston/AP)

Tras la acusación por parte del fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, los asesores y aliados del expresidente Donald Trump han expresado su preocupación por la posibilidad de que Trump sea juzgado en Manhattan, señalando que la población predominantemente votante demócrata del distrito es la razón por la que el expresidente no tendrá un juicio justo.

"No hay forma de que tenga un jurado justo", dijo un asesor. "¿Qué van a decir? '¿Alguna vez has oído hablar de Donald Trump?' ¿Has estado viviendo debajo de una piedra?'".

Sin embargo, los abogados de Trump actualmente no están considerando solicitar un cambio de jurisdicción y no planean tomar muchas decisiones hasta que vean la acusación, que se espera que suceda el martes cuando Trump sea procesado.

La acusación de Trump permanece sellada, por lo que no está claro qué cargos enfrenta el expresidente, y hay un largo camino por recorrer antes de cualquier posible juicio. Pero las discusiones iniciales entre los asesores indican que al menos algunas de las preocupaciones del equipo político de Trump siguen adelante.

En un comunicado, la campaña de Trump no abordó la ubicación del posible juicio y, en cambio, volvió a criticar la investigación de Bragg como una “persecución política”.

“La cruzada del fiscal de distrito de Manhattan contra el presidente Donald J. Trump no es más que una persecución política y, al igual que con cualquier otro engaño del que ha sido blanco el presidente Trump, no hay delito alguno, excepto la interferencia electoral por parte de los demócratas radicales mediante el uso de armas de nuestros sistema de justicia contra el presidente Trump y sus seguidores”, dice el comunicado.

La acusación del expresidente Donald Trump por parte de un jurado investigador de Manhattan pondrá en marcha un proceso penal que, en cierto modo, funcionará como el de cualquier otro acusado y, en otros, se verá muy diferente.

Cuando se acusa a alguien, los cargos a veces se mantienen en secreto hasta la primera comparecencia del acusado ante el tribunal. Los cargos que el jurado investigador aprobó contra Trump actualmente no son públicos.

Primera aparición: es probable que a Trump se le permita entregarse voluntariamente, y varias fuentes le dijeron a CNN que se espera que el expresidente comparezca ante el tribunal el martes para su lectura de cargos.

Lo que sucede en una primera aparición puede variar. Si una primera comparecencia es también una lectura de cargos, se espera que se presente una declaración de culpabilidad. Es típico que las condiciones de liberación se discutan —como las restricciones de viaje o el confinamiento domiciliario— en la primera comparecencia y se le informe a los acusados sus derechos. Los abogados del gobierno y del acusado también suelen comparecer en esta etapa del proceso judicial.

Seguridad adicional: Trump tendrá que pasar por ciertos procesos por los que debe pasar cualquier otro acusado cuando se presenta un cargo en su contra. Pero su condición de expresidente que actualmente se postula nuevamente para la nominación presidencial republicana en 2024 sin duda inyectará seguridad adicional y preocupaciones prácticas en torno a los próximos pasos en su caso.

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Algunos legisladores republicanos están criticando la acusación del jueves del jurado investigador de Manhattan contra Donald Trump. Esto es lo que están diciendo:

El senador John Cornyn: el miembro del liderazgo republicano en el Senado, le dijo a CNN que la acusación de Trump “parece que esta es una oportunidad para que este (fiscal de distrito) intente aparecer en los titulares y ganar publicidad”.

Representante James Comer: el presidente de Supervisión de la Cámara de Representantes atacó la “cacería de brujas política” del expresidente Donald Trump el día después de que el fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, lo acusara.

“Algo que nos preocupa en Washington, al congresista Jordan y a mí, es si se está coordinando aquí entre Merrick Garland, el DOJ y todas estas diferentes entidades que persiguen a Donald Trump”, dijo Comer a Fox el viernes. “Esta es una cacería de brujas política, están haciendo todo lo posible para crear una narrativa que lastimaría a Donald Trump”.

Comer le dijo a CNN que la investigación de Bragg es “un truco político”.

Antes de la acusación, Comer y otros dos presidentes de la Cámara enviaron una carta solicitando testimonio e información de Bragg sobre su investigación.

Senador John Barrasso: el presidente de la Conferencia Republicana del Senado calificó la acusación como un "golpe político" en un comunicado a CNN.

“Este es un enjuiciamiento por motivos políticos por parte de un activista de extrema izquierda. Si fuera alguien que no fuera el presidente Trump, nunca se presentaría un caso como este. En lugar de ordenar trabajos políticos de éxito, los fiscales de Nueva York deberían centrarse en sacar a los delincuentes violentos de las calles”, dijo.

Representante Marjorie Taylor Greene: la aliada clave de Trump, que también está cerca del liderazgo republicano en la Cámara de Representantes, tuiteó que planea viajar a la ciudad de Nueva York el martes para protestar contra la acusación de Donald Trump, la última señal de cómo los republicanos están compitiendo para defender al expresidente.

Greene es miembro de la Comisión de Supervisión de la Cámara, una de las comisiones clave que intentan investigar la oficina del fiscal de distrito de Manhattan, y le dijo a CNN que regularmente mantiene a Trump actualizado sobre sus prioridades de investigación.

Representante Mike Johnson: Johnson, miembro del liderazgo republicano de la Cámara, atacó a Bragg y dijo que la acusación “casi garantizaba” que el expresidente Donald Trump será el candidato republicano a la presidencia.

“La persona que denigra la integridad, la integridad de todo nuestro sistema judicial es Alvin Bragg, este activista político financiado por Soros que ocupa la oficina del fiscal de distrito de Manhattan”, dijo Johnson en Fox News el viernes. “Está gastando todo su tiempo y recursos persiguiendo al expresidente. ¿Por qué? El momento es importante, porque el presidente ha anunciado que se postulará nuevamente”.

La acusación "garantizó" que Trump sea el candidato presidencial republicano "y probablemente obtenga la reelección" en 2024, agregó Johnson.

Lanny Davis, el abogado de Michael Cohen, aparece en CNN el viernes 31 de marzo. (CNN)

Lanny Davis, el abogado de Michael Cohen, cree que la posibilidad de una moción exitosa para desestimar la acusación del expresidente Donald Trump es "muy pequeña".

“Hay tanta disputa fáctica sobre los asuntos materiales”, dijo Davis a Erin Burnett de CNN este viernes por la noche, en respuesta a los comentarios del abogado de Trump, Jim Trusty. "Un tribunal no priva a un jurado de tomar una decisión. Una moción de desestimación es una decisión de privar a un juicio por jurado y ese es un estándar muy alto como abogado. Es muy raro que un juez le niegue a un jurado el derecho a decidir disputas de hecho”.

Trusty le había dicho a Burnett que había un problema fundamental con el caso, según lo que se supo a través de los informes de los medios, ya que no tiene "intención de defraudar" como se define en la jurisprudencia del estado de Nueva York. “Entonces, creo que van a ver mociones muy sólidas en el futuro cercano, una variedad de mociones, tal vez mociones para desestimar que creo que pueden eliminar esto”, dijo.

Un poco de contexto: como informó CNN, Cohen fue un jugador clave en el esquema del supuesto dinero por pago de silencio que involucra a Stormy Daniels. El antiguo mediador de Trump facilitó los pagos, realizados días antes de las elecciones presidenciales de 2016, y la Organización Trump le reembolsó por adelantar el dinero a Daniels.

Cohen se declaró culpable de nueve cargos federales, incluidas violaciones de financiamiento de campañas, y fue sentenciado a tres años de prisión.

Stormy Daniels en el Teatro Linwood Dunn el 11 de mayo de 2022 en Los Ángeles, California. (Phillip Faraone/Getty Images/ARCHIVO)

La acusación del jurado investigador contra el expresidente de EE.UU. Donald Trump fue una "reivindicación", "monumental" y "épica", dijo la estrella de cine para adultos Stormy Daniels al periódico británico The Times.

Daniels también dijo que recibió un torrente de abusos a las pocas horas de la acusación y que, por primera vez, tiene miedo.

"El número y la intensidad son los mismos que la primera vez, pero esta vez es directamente violento", dijo Daniels en la entrevista publicada este viernes.

“Es especialmente aterrador porque el propio Trump está incitando a la violencia y alentándola”, agregó.

Se suponía que Daniels aparecería en TalkTV de Gran Bretaña para una entrevista exclusiva con el presentador Piers Morgan este viernes por la tarde. Piers Morgan escribió en su cuenta oficial de Twitter que Daniels tuvo que “posponer repentinamente” la entrevista minutos antes de que comenzara por “problemas de seguridad”.

El expresidente Donald Trump enfrenta cuatro investigaciones criminales diferentes por parte de tres niveles diferentes de gobierno: el fiscal de distrito de Manhattan; el fiscal de distrito del condado de Fulton, Georgia; y el Departamento de Justicia.

Aunque fue acusado por un jurado investigador de Manhattan, todavía puede postularse para presidente en 2024. Trump anunció su candidatura en noviembre.

“Nada impide que Trump se postule mientras está acusado, o incluso condenado”, dijo Richard Hasen, profesor de derecho en la Universidad de California en Los Ángeles.

La Constitución requiere solo tres cosas de los candidatos:

• Que sean ciudadanos por nacimiento.
• Que tengan al menos 35 años.
• Que sean residentes de EE.UU. durante al menos 14 años.

Como cuestión política, tal vez sea más difícil para un candidato acusado, que podría convertirse en un criminal convicto, ganar votos. Los juicios no permiten que los candidatos den lo mejor de sí mismos, pero no les está prohibido postularse o ser elegidos.

Hay algunos asteriscos tanto en la Constitución como en las Enmiendas 14 y 22, ninguno de los cuales se aplica actualmente a Trump en los casos que se consideran más cercanos a la acusación formal.

Límites de plazo. La Enmienda 22 prohíbe que cualquier persona que haya sido presidente dos veces (lo que significa que haya sido elegido dos veces o haya servido parte del mandato de otra persona y luego haya ganado el suyo propio) se presente nuevamente. Eso no se aplica a Trump ya que perdió las elecciones de 2020.

El proceso de destitución. Si una persona es acusada por la Cámara y condenada por el Senado por delitos graves y delitos menores, se le destituye de su cargo y se le inhabilita para volver a servir. Trump, aunque fue acusado dos veces por la Cámara durante su presidencia, también fue absuelto dos veces por el Senado.

Descalificación. La Enmienda 14 incluye una "cláusula de descalificación", escrita específicamente con miras a los exsoldados confederados. La acusación en la ciudad de Nueva York con respecto al supuesto pago de dinero por el silencio a una estrella de cine para adultos no tiene nada que ver con rebelión o insurrección. Tampoco los posibles cargos federales con respecto a los documentos clasificados.

Los posibles cargos en el condado de Fulton, Georgia, con respecto a la intromisión en las elecciones de 2020 o a nivel federal con respecto a la insurrección del 6 de enero de 2021, tal vez podrían ser interpretados por algunos como una forma de insurrección. Pero esa es una pregunta abierta que tendría que abrirse camino a través de los tribunales. Las elecciones de 2024 se acercan rápidamente.

El jurado investigador de Nueva York que escuchó el caso contra Donald Trump estuvo a punto de interrumpirse durante varias semanas. Los abogados del expresidente creían este miércoles por la tarde que tenían al menos un pequeño respiro de una posible acusación. Trump elogió la demora percibida. El fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, tenía otros planes.

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